En el sistema educativo aleman con sólo 11 años a los niños se les divide en tres grupos en función de sus notas y su velocidad de aprendizaje. Los que obtienen mejores notas continúan su formación en gymnasium, pudiendo acceder a bachillerato y se les prepara para la prueba de acceso a la Universidad. El resto de alumnos son divididos en realschule o al hauptschule. Realschule es basicamente para el estudiante promedio y hauptschule para aquellos alumnos que les cuesta alcanzar los objetos académicos. ¿Parece una locura, verdad? Pues funciona. Tiene una tasa de abandono escolar del 10%, la mitad que España, y del 7% de paro juvenil.
¿Piensas que es el sistema idóneo? Visto de esta manera parece muy radical, ¿por qué he de ser considerado inferior academicamente? ¿quién tiene el derecho de decidir mi futuro? En función de las notas, los profesores elaboran un informe en el que determinan si el estudiante tiene las capacidades para ir al gymnasium, al realschule o al hauptschule. En algunos Estados alemanes, los padres, según el informe y su criterio, son los que deciden el destino de su hijo/a pero cada Estados federado aleman tiene su propia normativa educativa. No en todos los Estados pueden decidir los padres.
¿Este sistema aleman es el más eficiente? No tiene porqué. En países como Polonia la división de los alumnos se da a los 16 años, como en España, y su tasa de abandono escolar es de 5,3%. Sólo podemos decir que a los alemanes les funciona y sobre todo se debe a que las empresas creen en este modelo y lo apoyan.
De todas formas ¿es tan malo estar en el nivel medio? Aquellos alumnos que acaban en el grupo de realschule o al hauptschule terminan sus estudios a los 16 años y pueden optar a módulos de Formación Profesional (FP) y FP Dual, formación que ha garantizado el éxito del país germano y que, ahora, está en auge en España.
La formación profesional compagina durante dos años los estudios con prácticas en una empresa, de forma intercalada. Esta formación ayuda a las empresas a tener contratado personal más cualificado.
Independientemente de si es mejor dividir a los alumnos a los 11 o 16 años, los jóvenes deberían tener claro que existen determinadas opciones válidas para cada perfil. Bien seas de universidad o bien de formación profesional, debes conocer qué es y si es tú lugar. Tú te conoces mejor que nadie pero déjate aconsejar por tus tutores y formadores, ¡conoce tu futuro!