Cuando buscas un empleo, es fundamental conocer los diferentes tipos de contratos laborales vigentes en España en 2025. Cada uno tiene características específicas que pueden influir en tu estabilidad, derechos y beneficios. Antes de firmar cualquier documento, es clave entender qué implica cada modalidad. A continuación, te explicamos los más comunes.
Es el contrato más estable y deseado por los trabajadores. No tiene una fecha de finalización definida y proporciona mayor seguridad laboral. Puede ser a jornada completa o parcial. Los empleados con este tipo de contrato suelen tener acceso a indemnizaciones más altas en caso de despido y a beneficios como vacaciones pagadas y prestaciones sociales.
Establece una relación laboral por un tiempo determinado y se utiliza en situaciones específicas como:
Destinados a la formación y adquisición de experiencia profesional. Dentro de esta categoría encontramos:
Utilizado para trabajos de naturaleza estacional o actividades que no se repiten en fechas ciertas. Ofrece una relación laboral estable pero intermitente, asegurando continuidad laboral dentro de una empresa sin una jornada continua.
Antes de firmar un contrato, es crucial leer cada cláusula, conocer tus derechos y asegurarte de que se adapta a tus necesidades y expectativas laborales. Cada tipo de contrato ofrece diferentes niveles de estabilidad, beneficios y obligaciones, por lo que elegir el adecuado puede marcar la diferencia en tu carrera profesional.
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